No te das una idea lo feliz que me hiciste, esa alegría que... como explicarlo..., era la alegría de la certeza. Cuando la pelota llegaba a tus pies, la única duda que teníamos era: ¿que ángulo elegirá? Tu figura inmensa se hace inconmensurable al lado de la mediocridad que te precedió.
Eternamente gracias al último goleador que me hizo llorar.
Hoy colgaste los botines en el corazón del pueblo riverplatense
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3 comentarios:
¡Chiiilenoooo, chiilenooooo, chiilenooooo!
Gran blog! Riverplatense y compañero.
Al matador núnca lo vamos a olvidar.
Grande Chileno! que delantera que hacia con Ortega y Francescoli... de la mejor epoca de river
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